Mostrando entradas con la etiqueta Ex libris. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Ex libris. Mostrar todas las entradas

jueves, 21 de junio de 2012

Ex visis, marca para videotecas

Mucho más antes de conocer los sellos, el hombre ha buscado acuñar sus peculios mundanos con una impronta que denote pertenencia a él. De esta forma apareció recientemente el EX VISIS. Constituida por la preposición latina que rige ablativo ex y el participio ablativo plural ex-visis —que podríamos considerarlo sustantivo— la palabra ex-visis significaría: de entre las cosas vistas de o con una licencia: de las cintas (de video) pertenecientes a. Esto vendría a ser a las películas, cintas, film, rollos, celuloides, vídeos, etc.… lo que los ex libris son a los libros.
                                                             
En los diseños de estas marcas, incluiríamos, como pasa con los ex líbris, la locución latina ex visis y el nombre y apellido del poseedor, que serían los elementos invariables. A continuación definiríamos la imagen o el componente iconográfico, según el aspecto, la personalidad, las virtudes, el retrato psicológico, y todo aquello que tienda al diseño gráfico.

Salvando el hecho de que uno de los títulos de nuestra videoteca llegase o llegue  a extraviarse, es una interesante propuesta para adornar nuestras películas más atesoradas. Del mismo modo podríamos acuñar fijar otras expresiones de origen latino, ejemplo de ello Ex musicis, Ex eroticis, etc.…

domingo, 10 de junio de 2012

Ex libris, impronta personal del espíritu literario


El ex libris, (también conocido como ex bibliotheca, o e-libris, y en ingles bookplate) en su inicio y en su concepto originario, indica la pertenencia que una persona imprime en el revés de la cubierta ó en la guarda del libro. Esto es lo que constituye el verdadero espíritu del ex libris, en las primeras indicaciones de pertenecía se usaba la enunciación pura y escueta ex libris, frase latina que significa de entre los libros ó (uno) de los libros, a la cual se añadía el nombre del propietario (persona, institución, familia, etc...) lo cual marcaba que el ó los libro/s que poseían esta marca, pertenecen o eran de propiedad de fulano. Posteriormente, a está formula latina se le agregaría más ó menos una representación gráfica. Lo que constituiría lo que se conoce como el actual ex libris, á saber: una representación gráfica, distintiva, alegórica, á veces simbólica, en la que se hallan combinada la voz ex libris y el nombre del poseedor del libro. A la hora de hacer uso de esta marca en la biblioteca, en los libros, etc...tendremos la necesidad de tenerlos en hojitas sueltas de modo que puedan pegarse á cada uno de los volúmenes. Algunos bibliófilos cuentan con varios diseños de estos ex libris, y lo colocan según el tema que trate el libro en cuestión. Para que un ex libris cumpla con su objetivo, ha de llevar el nombre del propietario (en mi opinión, algo imprescindible), ya que la mera representación gráfica no basta, ahí casos en los que a un ex libris no se lo puede asociar con su dueño, ya sea por estar desprovisto del nombre del titular, ó debido la antigüedad del mismo, es inteligible. En relación con la representación gráfica ó el dibujo en si, este a de tener una significación con el portador, ya sea por su profesión, con la composición de su biblioteca, por su personalidad, etc... su simbolismo debe ser lo más claro posible y evitar lo excesivamente enigmático u obscuro (en algunos caso esto no se cumple). Se debe pensar que tiene que contribuir al adorno del libro y no profanar al mismo, con un dibujo impropio, imperfecto o que este desprovisto de un tono de buen gusto (esto también es algo de lo que están desprovistos muchos ex libris). Tengamos presente que cuando el propietario de un libro evidencia su gusto ó el interés en conservarlo y adhiere á su encuadernación el justificante del dominio, lo reviste de aquellos emblemas ó signos que responden mejor á sus ideas, aprovechando el escaso espacio de unos cuantos centímetros cuadrados para que que un artista simbolice sus aspiraciones, su fe religiosa, sus vanidades nobiliarias, sus predilecciones científicas, ó sus convicciones filosóficas.

Durante la edad media con el desarrollo de la miniaturización y la elaboración de manuscritos artísticos, también se desarrollo la producción del ex libris. Con la invención de la imprenta arranca el verdadero desarrollo de esta disciplina que tiene un gran auge. Fue en esta época que se adapto la xilografía primitiva para la producción de hojas gráficas, las cuales pudieran ser adheridas a la parte interior ó las primeras hojas de una obra. Los blasones y lemas de los nobles, hacían a menudos de ex libris. Los ex libris más antiguos que se conocen, usados en libros como señal de propiedad son de origen germano y fueron unos grabados en madera de escudos de armas. Con el antiguo desarrollo de las arte gráficas (fotograbado, serigrafía, calcografía, litografía, etc...) y las nuevas técnicas (diseño gráfico, reproducción fotográfica, sellos, etc...) este arte experimentan su mejor momento, debido a la variada formas de realización permiten a cualquier persona poder acceder a poseer un ex libris.

 


Después de todo, el ex libris es al talento lo que el basón a la nobleza; uno y otro han de ser dignamente representados y viceversa.

domingo, 6 de noviembre de 2011

Marcelo Rubén Agüero Urquiza

Versión 1

Diseño del ex líbris de Marcelo Rubén "Quebracho" Agüero Urquiza.

Versión 2

viernes, 4 de noviembre de 2011

María Gabriela Rivera Serantes


Diseño del ex líbris para María Gabriela Rivera Serantes.

StatCounter